Las tres son tan diferentes, pero así como nosotros, cada una tiene su especialidad. Nosotros te contamos cómo les puedes sacar el mejor provecho a las tres...
CREMA DE MANÍ:
La crema de maní suele ser "la que mejor combina". Combina perfecto con frutas o con algo dulce. Por ejemplo, ¿Quién no ha visto en las películas que se hacen siempre un sándwich de mantequilla de maní y mermelada? Es porque esta combinación es absolutamente perfecta.
Siempre vemos a los deportistas comer banano o fresas con mantequilla de maní para antes y después de entrenar. Tampoco es coincidencia. Además de ser un súper snack por ser liviano y brindar energía, proteína y muchos nutrientes, es delicioso. ¡Tienes que probarlo!
Otra opción es que puedes usarla con unos waffles o pancakes y con tu miel favorita, ¡créeme, no te arrepentirás!
CREMA DE ALMENDRAS:
La crema de almendras tiene un horneado tan perfecto que la hace ideal para ser la protagonista. Intenta comerla con una tostada de pan o una galletita de arroz y como si quieres, agrégale unas gotitas de tu miel favorita y quedará, ¡para chuparse los dedos!
¿Te contamos un secreto? Algunos de los mejores hoteles y restaurantes del país, usan nuestra crema de almendras para sus preparaciones. Así que, ¡tú también puedes!
CREMA DE MARAÑON:
Nuestra crema de marañón es la crema más rica del mundo mundial. Los marañones tienen un sabor tan único y delicioso y la verdad es que nuestra textura no la vas a encontrar en ningún otro lugar. Es la más suavecita y cremosa de todas.
Te diría mentiras si te dijera que no me la como a cucharadas porque sí lo hago casi todos los días. También, se puede comer con postres, con tostadas y galletas. Tenemos una clienta que hace brownies y el topping es nuestra crema de marañón. Queda simplemente maravilloso.
Básicamente le queda bien a casi todo. ¡Pruébala y nos cuentas tú con qué la utilizas!
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